Algunas de las ventajas de usar herramientas de localización de software frente a los editores de recursos de software o los entornos de desarrollo son:
- Los editores de recursos integran muy pocas funcionalidades que apoyen la traducción. Normalmente, les faltan funcionalidades como la generación de glosarios, memoria de traducción, estadística, corrección ortográfica, entre otras; por tanto, la actualización de un programa ya traducido anteriormente tiene que realizarse desde cero
- Las herramientas de localización protegen los elementos de la interfaz de usuario y la codificación, de forma que los traductores/localizadores no pueden cambiarlas o eliminarlas por error mientras traducen
- Las herramientas de localización permiten a los usuarios que marquen cadenas (con marcadores de revisión) si dichas cadenas han sido reutilizadas de versiones anteriores, si tienen que ser revisadas o si deben ser eliminadas.
- Al contrario que las herramientas de localización, que son aplicaciones pequeñas e independientes, los editores de recursos tienen que instalarse como parte de un entorno de desarrollo que puede que use demasiados recursos del sistema
(Adaptado de Esselink, 2000:383)
Por último, usando una herramienta especial (una herramienta de localización de software) pueden realizarse las siguientes tareas:
- Preparación del proyecto
- Determinación de las rutas de origen y de destino
- Elección del analizador sintáctico (parser)
- Selección de glosarios, MTs y bases de datos terminológicas
- Protección de cadenas específicas (sólo lectura)
- Inserción de comentarios para traductores, revisores, etc.
- Pseudotraducción
- Traducción de las cadenas
- Adaptación de la interfaz de usuario
- Generación de los archivos de destino
- Importación/exportación de glosarios, terminología, MT
- Almacenamiento del proyecto