Otros elementos que pueden variar igualmente según las convenciones culturales son los formatos. Especialmente al localizar software, es habitual que los traductores tengan que adaptar los formatos de fecha, papel y moneda. De la misma forma, las unidades de medida (como las distancias, pesos y unidades de volumen) aparecen con cierta frecuencia en las aplicaciones de software, y su adaptación o conversión a una medida equivalente dependerá de la función de la información (cf. Schmitz, 2005a:16).