La gestión terminológica se ha convertido en una actividad esencial para los traductores, ya que la terminología no suele estar disponible en las fuentes de información convencionales (p.ej. diccionarios), y, aun cuando está disponible en otras fuentes como Internet, normalmente no está estandarizada.
En el proceso de adaptación regional de contenidos electrónicos, es decir, la traducción y adaptación cultural de información digital (eContent) para mercados locales, debería usarse la misma terminología, de forma coherente, en todos los componentes del producto (p.ej. los manuales de usuario, el archivo de ayuda, el sitio web, etc.)
La terminología específica relativa al producto viene suministrada por los clientes en forma de glosarios de empresa, que normalmente requieren ser importados a la base de datos del traductor. Durante el proceso de adaptación regional, suele ocurrir que los textos de origen que han de ser traducidos se modifican después de haber sido traducidos, porque le producto siguen desarrollándose. En tal caso, la traducción se puede convertir en un infierno si no se cuenta con una gestión terminológica adecuada.